Hacemos de la cama
nación y templo,
testigos de sueños,
ruido y silencio.
El lugar primero, nuestro espacio a solas, y el punto de encuentro.
Respiraciones profundas y placer agitado; el disfrute profundo por hacer del amor un regalo.
Tendemos la cama de recuerdos. Sala de espera frecuente para poner nuestros cuerpos y envolvernos.
Hacemos de la cama momentos. Instantes. Una cita constante para encontrarnos de nuevo. La cama: nuestro monumento.
-Mon
Inspiración detonante
El MonDay pasado te compartí sobre Contraforma, la obra más reciente de la escritora @Sara Audirac; y un fragmento del poema "Fotograma de una mujer bebiendo café", fue lo que me detonó e inspiró a escribir, un portal creativo que me llevó a mi propio poema.
Hundimiento: una historia efervescente
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Algo tenemos las personas que vivimos cerca del mar. Tal vez sea un privilegio, el regalo de ver cómo el sol pinta el cielo de distintos colores, el milagro de escucharlo rugir como un corazón eterno, o simplemente la libertad de elegir un lugar donde nuestra alma se siente en casa.